Eslovenia se impuso a Croacia en el partido correspondiente a la tercera jornada del grupo B, que comparten con EEUU, Brasil, Túnez e Irán por 91 a 84. El partido que en teoría definirá el tercer y el cuarto puesto del grupo se ha convertido a partir del tercer cuarto en lo más parecido a un concurso de triples: once tiros más allá de la línea de 6,25 ha anotado cada equipo y con unos porcentajes muy buenos: 50% para Eslovenia y 55% para Croacia. Finalmente el encuentro se lo llevó Eslovenia que, además de estar acertada en el tiro, supo defender con intensidad cuando hacía falta y dominó el rebote, especialmente el rebote ofensivo.
En los segundos diez minutos, la intensidad bajo los tableros fue igual o mayor que en el primer cuarto y las faltas caían por ambos lados: Tomic se ponía con 3 faltas, Andric con 4 (cuatro faltas en un suspiro) y Brezec con tres también. Esta batalla en la pintura la dominaba claramente Eslovenia que, pese a su juego mediocre en ambas canastas, se mantenía viva mediante la captura de rebotes. Brezec, Slokar y Vidmar (que haría un 2+1 después de rebote ofensivo digno de ver) campaban a sus anchas y permitían dobles y triples oportunidades en los ataques. Sin embargo, no era suficiente y Croacia seguía mandando gracias a un Ukic funcionando de playmaker - y anotador cuando se requería -, a un Tomas muy inspirado y a las 10 pérdidas de balón eslovenas. Al descanso, 39-44.
Y entonces salió a relucir la fina muñeca que todas estas selecciones de la antigua Yugoslavia tienen: en el tercer cuarto Eslovenia con 4 ataques consecutivos finalizados en triple (Dragic, Nachbar, Slokar y hasta Zupan) daban la vuelta al marcador con un parcial de 13-5. Además, su defensa (que combinaba zona 2 -3 con defensa individual) apretaba e impedía la fluidez del balón croata. Croacia veía como sus jugadores altos seguían sin aparecer en el partido, pero "sólo" estaba 6 abajo antes del último cuarto gracias a Popovic, que anotó 11 puntos, con tres triples, casi consecutivos.
A Popovic se le unieron de nuevo Ukic (20 puntos, 7 asistencias) y Tomas (17 puntos) para volver a igualar el partido. Sin embargo, la quinta falta de Tomic, la lesión de Zoric en un tapón, la defensa eslovena, que ya no permitía tiros cómodos, y el juego en conjunto esloveno hizo que la ventaja subiera hasta los 7 puntos a falta de dos minutos. A partir de ahí, carrusel de tiros libres para ambos equipos que aseguraba a Eslovenia su triunfo y quién sabe si su tercer puesto.